

Y Sporty, comic que tenia y desapareció, claro, es como un libro de Ted Hughes.

Recuerdo que ir de compras con la vieja a Galerías Preciados era mi gran salida semanal. Ella me dejaba en la última planta donde estaban los comics. En concreto siempre me atrajo Galerías de humor, un batiburrillo de comics de ediciones B que no vendían por separado y los colaban a precio de saldo según algún convenio con la extinta Galerías P. Entre chaquetas ochenteras de saldo me sentaba y clavaba mis ojos en los comics de Ramis. Mi madre me prometía uno si me portaba bien y me quedaba allí abajo. Los maniquís desaparecían junto al ruido, las horas pasaban y yo alucinaba con este gran genio de la historieta española.

PD: ¡Viva el comic español!,¿ verdad?, Doctor Burillo....

2 comentarios:
Alfalfa Romeo y yo, tenemos mucho en común , tanto por la tragedia Shakesperiana, como por mis amores imposibles.
Terminaré comiendo alfalfa como los burros.
Yo tenía un alfa romeo pero lo destrocé contra la comisaría.
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